La inquebrantable lealtad de Rafael Nadal hacia su compañero es como su forma de amar el tenis, siempre apasionada y sublime.
Rafael Nadal es uno de los mejores tenistas de todos los tiempos. Este tenista no solo tiene una carrera gloriosa con muchos logros sorprendentes, sino que también hace que muchas personas lo admiren por su leal amor por su compañera María Francisca Perelló.
La pareja se casó en 2019 en una boda sencilla, pero antes llevaban juntos mucho tiempo, más de 14 años. María conoció a Nadal cuando tenía 17 años y quien creó esta relación no es otra que Maribel Nadal, la hermana menor del astro español. Decidieron comprometerse en 2005.
María es una persona muy reservada y rara vez aparece en los medios. Tampoco utiliza las redes sociales y siempre limita recibir entrevistas de la prensa. Incluso la belleza española rara vez aparece en las gradas para animar a su pareja. Todo lo que hace tiene como objetivo la estabilidad de Nadal.
En una rara entrevista con The Telegraph, Perelló reveló: ” Necesita su propio espacio cuando juega. Si lo sigo a todas partes, creo que existe el riesgo de que dejemos de llevarnos bien” .
Se sabe que la esposa del astro del tenis es licenciada en Gestión Empresarial por la Universidad de las Islas Baleares. Aunque María no tiene una belleza sobresaliente ni una figura como la de una modelo, tiene el amor inquebrantable y duradero del mejor tenista del mundo. La mujer es un sólido respaldo para que Nadal pueda sentirse seguro a la hora de dedicarse a su carrera tenística.
Actualmente trabaja como directora de proyectos para la Fundación Rafa Nadal, una organización benéfica que Nadal lanzó en 2008. La organización está activa en España e India para ayudar a niños desfavorecidos. Gracias a la gestión y administración de su esposa, el famoso tenista deambula libremente por todas partes con un apretado calendario de competiciones.
La pareja dio la bienvenida a su primer hijo en octubre de 2022. La estrella del tenis ha compartido repetidamente su amor por los niños: ” Soy una persona que ama a los niños y soy un hombre de familia. Creo que lo más importante es cuidar de los niños “.
Se puede decir que, a pesar de ser una gran estrella, famosa en todo el planeta, Rafael Nadal no es un hombre mujeriego, siempre rodeado de fantasmas como tantos otros grandes nombres. Por tanto, es fácil entender por qué Rafael Nadal se ha convertido en el hombre más fiel del tenis.