Stake Land es una película de terror postapocalíptica dirigida por Jim Mickle que combina el terror de vampiros con el drama de supervivencia. La película se desarrolla en un mundo devastado por una epidemia de vampiros, donde los sobrevivientes deben moverse constantemente para evitar criaturas sedientas de sangre y facciones humanas hostiles. La película ha recibido elogios generalizados por su realismo crudo, su narrativa atmosférica y el enfoque fresco y realista que aporta al género de vampiros.

La historia sigue a Martin (Connor Paolo), un joven huérfano después de que su familia fuera asesinada por vampiros. Es acogido por un cazador de vampiros experimentado conocido simplemente como Mister (Nick Damici). Juntos, viajan a través de los devastados Estados Unidos, pasando por pueblos invadidos por vampiros y lidiando con grupos extremistas y hostiles, especialmente un culto llamado La Hermandad que adora a los vampiros como instrumentos de castigo divino.

Mientras viajan al norte hacia un rumoreado refugio seguro llamado New Eden en Canadá, Martin y Mister encuentran muchos aliados y enemigos. Cada ciudad y cada encuentro resaltan los desesperados y oscuros esfuerzos que los humanos harán para sobrevivir en un mundo invadido por monstruos.

La película explora cómo los humanos mantienen (o pierden) su humanidad en situaciones extremas. Si bien Martin y Mister dependen el uno del otro para sobrevivir, se les recuerda constantemente el precio de la supervivencia en un mundo donde los monstruos no solo son vampiros sino también humanos que explotan el caos.

El viaje de Martin y Mister es un viaje de autodescubrimiento, supervivencia y aprendizaje para tomar decisiones difíciles. Bajo la guía de Mister, pasa de ser un niño asustado a un sobreviviente resistente.

La Hermandad, liderada por Jebedia Loven (Michael Cerveris), representa a un grupo de extremistas que creen que la plaga de vampiros es un castigo de Dios, lo que agrega una capa de fanatismo religioso que los hace tan peligrosos como los propios vampiros.