En el pasado, ha habido innumerables ejemplos maravillosos de asociaciones entre humanos y perros, pero el último en Arabia Saudita los supera a todos. La historia te dejará asombrado y con lágrimas en los ojos.

Un perro callejero salvó la vida de una niña de tres días cuya madre la había dejado en un basurero. Hermosas imágenes del perro sosteniendo a la nueva cría en su boca se utilizaron para publicar la historia en el diario saudí “Sada”.

la historia

Según informes de periódicos locales, un perro hambriento vagó por las calles en busca de comida, pero regresó con las manos vacías. Luego llegó a través de una niña recién nacida, con su cordón umbilical todavía adherido.

WhaTheg no solo demostró la sensibilidad del animal hacia las personas, sino también por qué los perros son llamados compañeros leales.

El perro notó que la condición de la niña no era buena y se aseguró de que no estuviera expuesta a más daños. Tomó a la nueva bebé en su boca y la alejó de las peligrosas calles en busca de un refugio seguro.

El perro llevó a la recién nacida a la casa más cercana y la colocó en el balcón. Los residentes de la residencia no notaron la extraña condición de la nueva bebé hasta que el perro siguió aullando y la llevó al hospital.

Según los últimos informes, la niña se encuentra en buenas condiciones y solo sufrió heridas leves.

La historia fue publicada en un diario saudí después de que las fotos del perro y el joven se difundieran en las redes sociales del Golfo. Sin embargo, no está claro dónde ocurrió el accidente.

La lealtad del perro

Este perro callejero realizó un acto heroico al salvar la vida de un humano de una muerte segura.

El perro tenía hambre y el bebé estaba en estado grave. Es posible que se haya comido al niño humano para aliviarse, pero eligió salvar la vida del nuevo bebé, manteniendo su condición separada.

Las mascotas ahora brindan compañía, apoyo emocional, alivian la soledad y reducen el estrés. También mejoran las emociones positivas y la autoestima, especialmente en los niños. Si bien a muchas personas les encanta pasar tiempo con su perro o gato y nunca pensarían en renunciar a ellos, los consideran un miembro de la familia. Sin embargo, la convivencia entre humanos y animales no siempre es exitosa y, en algunos casos, cuando la relación fracasa, la adopción es el último recurso de la familia.

Los animales son abandonados en la calle por diversas razones, entre ellas, la falta de tiempo para brindarles los cuidados adecuados, dificultades económicas, basura desagradable y desafíos parentales. Pueden tener hijos, más miembros de la familia o perder su hogar. Sin embargo, lo que experimentan los animales en estas situaciones es que algunos tienen suerte y otros no.