Durante la ceremonia, Sebastián se comprometió a amar, honrar y respetar a Juliana en todas las circunstancias, un juramento que resonó profundamente en los asistentes. La novia lució un elegante vestido blanco marfil con un tocado delicado, mientras que el actor optó por un traje de tres piezas en tonos de café claro, reflejando el carácter sobrio y significativo de la ocasión.
